En la resplandeciente era de la Regencia, Adele no es una institutriz cualquiera. Bajo su fachada respetable, esconde una pasión clandestina por literatura prohibida, explorando los rincones más oscuros del deseo y la psique humana a través de libros que desafían los límites de su tiempo.

Su vida toma un rumbo inesperado cuando Balthair Chisholm, un enigmático escocés, además del mejor amigo del prometido de Adele, le ofrece refugio en su castillo en Escocia como institutriz de su hija, con una condición peculiar: cada noche, bajo las sombra de las velas, Adele debe leerle en voz alta las páginas de esos libros que tanto escandalizan a la sociedad y que tanto la fascinan a ella.

Lo que comienza como un acto de dominio sutilmente impuesto se convierte en un juego seductor de poder y pasión. Cada sesión de lectura nocturna se convierte en un juego de seducción que promete liberarlos de sus propias restricciones, mientras la tensión entre ellos crece con cada página girada.