Aquella mañana era una más en la vida del doctor San Sebastián; un día en la zona de urgencias del hospital en el que trabajaba.

Hasta que llegó ella, la mujer que, sin él saberlo, sería la que haría volver su mundo del revés.

Un accidente, una mujer que no recuerda nada, pero que no ha perdido su gracia, salero y desparpajo, ni el nombre de un grupo de Facebook.

Un hombre al que sí recuerda, una búsqueda para saber quién es ella, varios encuentros, la memoria recuperada y una verdad que sale a la luz haciendo que aquello que empezaba a surgir, se desvanezca como una burbuja que alguien hace explotar.

“¿Cómo se arregla un corazón destrozado?”

Para esa pregunta, solo el doctor San Sebastián tiene la respuesta.