Una solitaria tarde de verano, Alan Jones se encuentra en la costa del gran río. Con su mirada perdida hacia la nada, recuerda aquella noche tormentosa, hacía ya dos largos años, en la que su hermano desapareció. Allí conocerá al viejo Jack, un anciano que todos creen demente, el cual, desde hace más de cuarenta años, pasa sus días surcando las aguas, siempre en búsqueda de un ser maligno.
Alan descubrirá poco a poco, los oscuros secretos que oculta el río. Se verá envuelto en una búsqueda desesperada por salvar a su hermano, y a su propia alma.