Irene hará cualquier cosa para salvar a su madre muy enferma de morir. No tiene más remedio que suplicar ayuda a su rico y despiadado abuelo, quien repudió brutalmente a su madre por casarse con un hombre pobre.

Su abuelo accedió a ayudar. En una condición cruel: tiene que casarse con el poderoso multimillonario griego Christian Calloway.

Christian es impresionante en todos los sentidos: hermoso como el pecado y tiene un efecto devastador en las mujeres.

PERO Irene lo odia. Es tan cruel y despiadado como su abuelo. Sus reglas son las leyes, y deben ser obedecidas.

Su estricto orden. La novia debe vestir de blanco...

Impulsada por el desprecio, se rebeló y caminó por el pasillo vestida completamente de NEGRO, como si asistiera a su propio funeral.