Tentar a un duque es un pecado capital.
Tamsin Sinclair es conocida por sus modales audaces. Como Sinclair, apodada uno de los pecados capitales, se espera que sea inapropiada e incivilizada. Buscando consuelo de los implacables susurros sobre ella en un baile, Tamsin se retira a los jardines y conoce inesperadamente al excéntrico coleccionista de polillas, Duque de Ware.
Hayden Redford, duque de Ware, simplemente está recolectando especímenes durante el baile de su tía cuando toma la mala decisión de arrancar una polilla de la rodilla de la joven más famosa de Londres. Peor aún, su encuentro es presenciado por la maliciosa Lady Longwood. Si Tamsin hubiera sido otra persona, Ware podría haberse visto obligado a hacer algo honorable, pero su tía insiste en que casarse con Tamsin está fuera de discusión. Tampoco se puede permitir que los chismes sobre Ware y Tamsin se propaguen por Londres.
Sólo queda una solución que salvará la reputación y evitará que Ware se case tan por debajo de él. Se decide una farsa. Uno en el que Ware y Tamsin fingirán un vago vínculo con actividades intelectuales compartidas, lo que garantiza silenciar los chismes por aburrimiento al menos.